martes, 1 de agosto de 2023

Los sueños de la Chica Erizo

¿Cuáles son los sueños de la Chica Erizo? Me lo pregunto cada noche antes de dormir. ¿Qué tipo de sueños son? No lo sé, y quizá nunca lo sepa. Los sueños son volátiles. Hoy es ayer y mañana no ha llegado. Quizá lo sueños son satisfactorios sólo mientras se sueñan, pues aunque sabemos que son irrealizables, por unos momentos vivimos en ellos. Pero es que además, si se llegaran a materializar, siempre estarían acompañados por la decepción porque nunca serían exactamente tal y como los soñamos.
 
Sucede algo parecido con las ideas. Éstas existen en su forma más pura por un breve instante de tiempo. Mientras se van originando, se forman y destruyen, renacen y vuelven a perecer, para finalmente consagrarse como tales; ahí es cuando aparecen. Pero entonces querremos materializarlas, ya sea en palabra o en acción, y para eso debemos pensarlas de nuevo. Pierden todo su estatus de sagrado al ser contaminadas porque las arrebatamos de su ambiente, las desterramos del mundo al que pertenecen al nuestro, al mundano. Eso está ocurriendo ahora mismo mientras escribo esto. Estás siendo testigo de la forma mancillada de una idea original que brilló por sí misma como el propio Sol y que al querer darle forma física para ofrecértela como tributo ha quedado en una mera sombra de lo que imaginé. Podría volver a pensar, volver a tener una idea pura y excelente, podría hacerlo una o mil veces. El resultado siempre será el mismo. No podré plasmar en palabras nada más que una sombra de lo que piense.

De igual modo pasa con nuestra relación. Me permito llamarla así, aunque quizá me esté tomando muchas licencias. Nuestra porque nos involucra a ambos, independientemente de cómo nos sintamos ante ésta. Relación porque hemos establecido una conexión sin importar de qué tipo. Seguramente una ensoñación. Sí, por tanto me parece acertado llamarla nuestra relación. Cada uno de nosotros tendrá cientos de ideas en su cabeza de cómo podrían desarrollarse los acontecimientos que nos involucren. Y supongo que trataremos de acercarnos y hacer posible aquellas que más satisfacción nos produzcan. Pero he aquí, de nuevo, el mal que todo lo engulle. Nunca será exactamente igual a como lo imaginemos. Nunca será exactamente igual a como lo esperamos. Entonces, la cuestión que me invade es la siguiente: ¿Será suficiente? La respuesta dolorosa y más acertada será siempre no. Pero ese no no representa una verdad absoluta. Sería erróneo afirmar lo contrario. Entonces nos encontramos, a mi juicio, con dos posibilidades más. No, pero con matices y sí, pero con matices. A priori pudiera parecer que el resultado en ambas opciones sería el mismo. Que sólo se trata de una cuestión semántica, un juego de palabras. Exacto, pudiera parecerlo, pero no lo es. Elegir, si es que eso nos es posible, una u otra implica matices tales como la predisposición, la actitud, el ánimo o el propio estado de idealización de cada uno.

Mi condescendencia es legendaria, conocida en los Siete Reinos de la Tierra Media del País de las Maravillas. Pero creo que a la larga no traerá nada más que decepción y frustración. Un deseo que nunca podrá ser satisfecho y se volverá ponzoña. Tampoco quiero partir, no me traería descanso la ausencia, sino dolor. ¿Qué hacer? La propia pregunta es una trampa. ¿Qué hacer? Representa en esencia el deseo de satisfacer a la otra persona. No hacer nada. ¿Sería esa la respuesta más acertada? No hacer nada, con matices. ¡Oh, los matices! Una gran variedad de grises en tu mundo de blanco y negro. Infinitos matices. Se puede no hacer nada, pero estar siempre para cuando la otra persona lo necesite, por lo cual ya estás haciendo algo. Se está. ¿Será suficiente? No lo sé, Chica Erizo. No lo sé.

Las ideas comienzan a sobrepasar mis capacidades cognitivas y temo emborronar lo que hasta ahora he escrito. Soy consciente de que es sólo una sombra, pero mejor una sombra que una mancha vaga, indeterminada y distorsionada.

Seguramente nunca sabré cuáles son los sueños de la Chica Erizo, no serán nunca míos. Le pertenecen sólo a ella y a aquellos que ella siente.

Producto del trastorno para una trastornada. Mis más sinceras disculpas.
 

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